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Día de la Mujer en la Ciencia
Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia: reconocimiento a las 130 mujeres STEM de ZABALA
Ingenierías en todas sus especialidades, química, bilogía, biotecnología, ciencias ambientales, farmacia, física… son algunos de los perfiles de las 130 mujeres STEM que actualmente trabajan en ZABALA. 30 de ellas son doctoras
En 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 11 de febrero el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia con el fin de lograr el acceso y la participación plena y equitativa en la ciencia para las mujeres y las niñas, además para lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas.
Este día es un recordatorio de que las mujeres y las niñas desempeñan un papel fundamental en las comunidades de ciencia y tecnología y que su participación debe fortalecerse. La celebración de este día está dirigida por la UNESCO y la ONU, en colaboración con instituciones que promueven el acceso y la participación de mujeres y niñas en la ciencia.
Desde ZABALA hemos querido rendir un homenaje especial a las 130 mujeres STEM que forman parte de nuestro equipo profesional, 30 de ellas doctoras. Les hemos pedido que compartan sus reflexiones porque queremos ser su altavoz:
Visita las redes sociales de ZABALA (Twitter, LinkedIN e Instagram) para descubrir quiénes son y qué quieren expresar en un día tan significativo.
Además, te ofrecemos una entrevista muy especial a Rosa Segura, coordinadora de área y jefa de equipo en nuestra sede en Bilbao. Rosa es licenciada en Biología y Licenciada en Bioquímica por la Universidad de Navarra. Desde el 2004, es además Doctora en Ciencias por la Universidad Autónoma de Madrid. Durante cinco años trabajó en el Instituto de Catálisis y Petroleoquímica del CSIC y durante 8 años como investigadora en la Unidad de Biofísica centro mixto CSIC-UPV/EHU, donde compaginó las labores de investigación con la docencia como profesora de Bioquímica en la Licenciatura de Ciencias Químicas y en el Master de Biomedicina y Biología Molecular (UPV/EHU).
Es coautora de 21 artículos científicos y ha participado en más de 20 congresos científicos. Desde 2012 es consultora de proyectos de I+D+i en el sector biociencias y actualmente lidera en Bilbao al equipo experto en Programas de apoyo a la I+D+i de ámbito nacional.
Pregunta (P). ¿Cuándo fuiste consciente de tu inquietud por la Ciencia?
Respuesta (R). Fueron 3 los acontecimientos que creo que marcaron mi decisión de decantarme por desarrollar una carrera científica:
El primero fue la curiosidad que despertó en mi la serie de dibujos animados “La vida es así”. Ante la curiosidad y mis insistentes preguntas, ese año los Reyes Magos me trajeron un microscopio. En él vi las primeras células. La primera fue la piel de una cebolla, pero la que más ilusión me hizo fue ver las células de mi mejilla que teñí con azul de metileno.
El segundo fue en 7º de EGB. La amatxu de un compañero de ikastola que era enfermera se ofreció a hacer una práctica de laboratorio con nosotros en la que cada uno identificamos nuestro propio grupo sanguíneo.
Y la tercera y creo que la más importante, fue tener una profesora de Biología en 1º de BUP y en COU que me engancho a la Bioquímica.
(P). ¿Qué dificultades y qué apoyos encontraste cuando tomaste la decisión de profesionalizarte en el ámbito científico?
(R). La mayor dificultad ha sido siempre la precariedad e inestabilidad laboral. Desde los 24 hasta los 30 encadené beca tras beca, en el que además de vivir el estrés de competir en concurrencia competitiva por la beca, era con sueldos muy bajos. Además, por entonces las becas no cotizaban a la Seguridad Social.
No obstante, considero que he tenido mucha suerte en los grupos de investigación y con los investigadores principales con los que he trabajado, tanto en mi doctorado, con el Profesor José Manuel Guisán, como en mi etapa postdoctoral, con la Dra. Itxiar Alkorta y el Catedrático Félix Goñi.
Sin duda, el mayor respaldo ha sido que he tenido el apoyo incondicional de mi marido Álvaro, que comprendió desde el primer día mi trabajo y nunca me recriminó las infinitas horas que pasaba en el laboratorio, y que por supuesto, eran horas robadas de estar juntos.
(P). ¿Cómo ves, desde tu trabajo en ZABALA, el cambio en la valoración de las mujeres STEM?
Creo que poco a poco estamos visibilizando nuestro trabajo y que, aunque cada día son más las CIO y CTO que nos encontramos en las reuniones con clientes, tenemos aún mucho trabajo por hacer y por reconocer.
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